fluyendo entre géneros
Por: Alejandra Márquez Pallares.
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Foto: Cortesia de Io.
Io, de 25 años, comparte su viaje hacia la comprensión de su identidad de género. Descubrió que era género no binario en la adolescencia al darse cuenta de que su identidad no se alineaba de manera rígida con las categorías tradicionales. Habló sobre su historia y cómo fue todo este proceso de cambio desde la infancia y sus relaciones, ya que siempre fue una situación muy complicada hablar de esto en casa, porque sus padres son personas muy conservadoras y nunca tuvo la libertad para hablarlo abiertamente.
Para su padre, que él, su único hijo varón, fuera una persona de identidad incomprensible, era un problema y siempre le hizo sentir que había defraudado a la familia. También era complicado intentar hablarles de las personas con las que salía o de sus parejas sentimentales o sexuales, ya que para ellos el hecho de que él saliera tanto con hombres como con mujeres y se identificara a veces como hombre y como mujer era muy complicado, lo veían como casi un prostituto, el habla de cómo sentía que su padre solo pensaba en el morbo cuando llevaba a alguien a la casa.
A raíz de esto, a sus 18 años, tomó la decisión de escapar de su casa y cortar contacto total con su familia para así poder estudiar artes, y tener un proceso de aceptación de su identidad de género al lado de su familia era un poco complicado. Io cuenta que ha experimentado diversos desafíos y triunfos desde entonces, como cuando comenzó a comprar sin importar la sección en la que estuviera la ropa en las tiendas de alta gama, así lo vieran como “un maricón” como él lo expresó.
En su armario, tiene dos partes que divide en ropa "de hombre" y ropa "de mujer", pero en realidad, no le da mucha importancia a esas categorías.
"Para él, la ropa no tiene género"
Para él, la ropa no tiene género, es simplemente una forma de expresión personal. A veces elige prendas que se consideran tradicionalmente masculinas, como camisas de vestir, pantalones o chaquetas. Otras veces, opta por prendas que se asocian más con lo femenino, como vestidos, blusas o faldas, y perlas que le tapan todo el cuello. Para él, lo más importante es sentirse cómodo y auténtico en lo que lleva puesto, como también cuando se habla de su pronombre, no le importa que se utilice "él" o "ella" para referirse a sí, ya que ambos pronombres son igualmente válidos y su identidad trasciende las categorías de género tradicionales. Lo más importante es el respeto y la aceptación de su identidad de género.
Con su proceso de sanar heridas entiende que la clave, es la comunicación abierta y honesta con los seres queridos. Y también ha utilizado como inspiración su identidad de género y la forma en la que se siente para transformar su cuerpo y su forma de ser. Al compartir sus experiencias y sentimientos, Io ha construido relaciones más sólidas y comprensivas.
Para su padre, que él, su único hijo varón, fuera una persona de identidad incomprensible, era un problema y siempre le hizo sentir que había defraudado a la familia. También era complicado intentar hablarles de las personas con las que salía o de sus parejas sentimentales o sexuales, ya que para ellos el hecho de que él saliera tanto con hombres como con mujeres y se identificara a veces como hombre y como mujer era muy complicado, lo veían como casi un prostituto, el habla de cómo sentía que su padre solo pensaba en el morbo cuando llevaba a alguien a la casa.
A raíz de esto, a sus 18 años, tomó la decisión de escapar de su casa y cortar contacto total con su familia para así poder estudiar artes, y tener un proceso de aceptación de su identidad de género al lado de su familia era un poco complicado. Io cuenta que ha experimentado diversos desafíos y triunfos desde entonces, como cuando comenzó a comprar sin importar la sección en la que estuviera la ropa en las tiendas de alta gama, así lo vieran como “un maricón” como él lo expresó.
"ser género fluido significa experimentar y expresar diferentes aspectos de la identidad de género"
Su proceso de cómo y cuándo llegó a identificarse así viene desde los 13 años porque en ese momento fue que comenzó a sentirse de una forma diferente a la que se veía y esto trajo sus cuestiones cuando al principio pensó que era un problema psicológico, sentía emoción cuando robaba el maquillaje de su madre y por las madrugadas pero igual sentía miedo y tristeza al no poder irse así al colegio, sentía que era pecado y dios lo iba a castigar, así que solo se vestía como mujer cuando salía de fiesta con sus amigos pero aunque estuviera ebrio siempre antes de entrar a casa se cambia en un callejón cerca a su casa.
Cuando se le preguntó sobre el nombre "Io", explicó que eligió este nombre de pila porque le brinda una sensación de libertad y refleja su identidad cambiante. Considera que el nombre Io es un símbolo de la fluidez y diversidad que caracterizan su experiencia de género, y según la mitología Io es una figura importante y conocida. Era una ninfa, hija de Inaco, el rey de los ríos, y Meliá, una oceánide. La historia de Io está vinculada a Zeus, que era conocido por su afición a tener amoríos con mujeres mortales, era reconocida por su transformación y su viaje en busca de libertad. Es así como Io escoge este hombre porque puede representar su propia transformación y búsqueda de autenticidad, así como su deseo de liberarse de las restricciones impuestas por la sociedad en relación con las normas de género.
Io siente una conexión personal o admiración por la historia y lo eligió como un símbolo de su propia identidad y empoderamiento.
Io comparte valiosos consejos para quienes se encuentran en situaciones similares. Destaca la importancia de la autoexploración y la paciencia consigo mismo en el proceso de comprensión de la identidad de género. Sugiere conectarse con comunidades de apoyo y buscar recursos educativos para obtener una comprensión más profunda, ya que así se hace más fácil de entender por dónde están pasando y por qué lo están pasando. Comenta también que cada persona tiene sus diferentes procesos y no está mal sentirse diferente.
En resumen, Io muestra una visión valiosa de su viaje hacia la comprensión de su identidad de género, destacando la importancia de la autenticidad, la paciencia y la comunicación en la construcción de relaciones significativas. Su historia inspira a otros a abrazar su autenticidad y a navegar con confianza su propio viaje de autodescubrimiento.
Foto: Cortesia de Io.
